El agua constituye un recurso estratégico para el desarrollo sostenible del Perú y enfrenta crecientes presiones derivadas del cambio climático, el crecimiento poblacional y las prácticas de gestión fragmentadas. A nivel global, se proyecta un déficit del 40% entre la oferta y la demanda para 2030, mientras que en el Perú la problemática radica en la marcada desigualdad en la distribución geográfica del recurso: más del 98% se concentra en la Amazonía, frente a menos del 2% en la costa, donde se ubica la mayor parte de la población y la actividad económica. Este desbalance evidencia que el reto principal no es la escasez absoluta, sino la eficiencia en la gobernanza, la infraestructura y el uso del recurso. Además, la naturaleza multifuncional del agua, que puede ser insumo productivo, bien final, stock o flujo, plantea desafíos de coordinación, ya que la gestión suele estar fragmentada por sectores y usuarios, generando decisiones parciales y desarticuladas. El documento propone un análisis integral y una política pública orientada a optimizar la gestión hídrica, con el fin de garantizar la seguridad del agua y potenciar su rol como activo estratégico para el desarrollo sostenible del país.

Galarza, Elsa

Se desempeña como profesora principal adscrita al Departamento Académico de Economía e investigadora en la Universidad…